1. FOMENTA LA CREATIVIDAD Y ORIGINALIDAD

Trabajar con telas fomenta la creatividad, originalidad y la autonomía, permite explorar y experimentar con colores, distintos tejidos y texturas creando combinaciones únicas y propias, estimulando el pensamiento creativo y lo que fomenta el sentimiento de satisfacción tras un trabajo bien hecho.

 2. DESARROLLO DE LAS HABILIDADES MOTORAS Y COGNITIVAS

La manipulación de telas (al coser) y el uso de las agujas o las manos para tejer (en máquina) mejoran la coordinación mano-ojo y la motricidad fina. Además, estas actividades estimulan la concentración y la resolución de pequeños desafíos durante el proceso creativo.

 3. REDUCCIÓN DEL ESTRÉS Y MEJORA DEL BIENESTAR EMOCIONAL

Actividades como tejer tienen un efecto casi meditativo. Pueden ayudar a disminuir la ansiedad y el estrés, creando un espacio para el descanso mental y la relajación tanto en niños como en adultos.

4. POTENCIA LA PACIENCIA Y LA PERSEVERANCIA

Requiere de tiempo y esfuerzo, lo que enseña que los resultados valiosos se logran con dedicación y constancia. Este aprendizaje refuerza la capacidad de enfrentar desafíos y superarlos paso a paso.

5. FOMENTA LA SOCIABILIZACIÓN Y APRENDIZAJE INTERGENERACIONAL

El arte de tejer y trabajar con telas a menudo se practica en grupo o en familia. Compartir técnicas y proyectos crea lazos, favorece el intercambio de conocimientos y puede revivir tradiciones artísticas que se transmiten de generación en generación.